lunes, 27 de marzo de 2017

"TAMSA, orgullo de Veracruz"


Héctor Yunes Landa ARTICULISTA INVITADO


Como todo veracruzano lamento profundamente que la violencia se haya desbordado en el conflicto sindical de Tenaris- Tamsa.

La funesta noticia que enlutó dos hogares veracruzanos y acaparó la mirada nacional, dista mucho de lo que es y de lo que significa esta empresa para Veracruz y para México.


El enfrentamiento entre trabajadores y ex trabajadores de esta empresa de talla mundial, pudo y debió evitarse por parte de las autoridades estatales.

Sin embargo, frente al conflicto, imperó la indolencia, la desidia e incapacidad del Gobierno de Veracruz.

El titular del poder ejecutivo del estado, tenía la obligación de que el conflicto se resolviera o al menos que no se agudizará. Más aún después de que los medios de comunicación alertaron sobre la tendencia del conflicto a complicarse.

Su obligación, ante el pleno conocimiento de que los ánimos podrían exacerbarse era, al menos, no caer en la tentación de capitalizar políticamente el problema.

Tenía, como experto en materia de seguridad que en campaña aseguró ser, la inherente obligación de prevenir la violencia mediante el acompañamiento de las acciones y pasos que, por separado o conjuntamente, dieran los grupos de trabajadores y sus representantes, a fin de propiciar y garantizar el ambiente más estable posible hasta que las autoridades laborales concluyeran el proceso de validación de la elección gremial.

Lamentablemente, hay que decirlo, la desconexión de la problemática social del Gobernador, ante la pérdida de tiempo de este último ocasionada por su enfermiza confrontación mediática con un dirigente partidista nacional, ha ocasionado una desatención impensable de un gobierno que en campaña se ganó la confianza ciudadana mediante promesas de que regresaría la tranquilidad al territorio veracruzano, lo que no solo no ha sucedido, sino que, por el contrario ha empeorado, al grado que tírios y troyanos, a poco más de los primeros 100 días de este "auto llamado" gobierno del cambio, ya lo califican como peor que el gobierno de Duarte, que ya es decir.

Desafortunadamente el desencanto llegó muy rápido, máxime para quienes confiaron en las promesas de cambio y en su reiterada falacia de que la seguridad y la gobernabilidad eran sus mayores fortalezas.

La violencia y sangre corrieron en Tamsa, empresa emblemática de Veracruz, que cotiza desde 1953 en la Bolsa Mexicana de Valores y fue la primera firma mexicana en el Mercado de Valores Estadounidense.

En la actualidad, a 65 años de fundada, Tenaris - Tamsa es uno de los más sólidos pilares del crecimiento económico del estado de Veracruz, genera aproximadamente cinco mil empleos directos y más de 23 mil indirectos.

Lo que sucedió en esta empresa, es reflejo de lo que sucede en otras partes del estado: no hay voluntad para el diálogo, no hay planes de seguridad, pero sí campañas y shows mediáticos.

A pocos días de conmemorar un año más de su magnicidio, recordamos una sentencia de Luis Donaldo Colosio que hoy, con el "auto llamado" gobierno del cambio cobra particular actualidad "la reversa también es un cambio".